El alumnado que presenta TDAH no requiere de estrategias específicas para acceder a la Web, puesto que no posee discapacidades que se lo imposibiliten. Cuando hablamos de accesibilidad en la Web hacemos referencia a que en una Web podamos acceder todos y podamos acceder a su información. Para profundizar en el término continuemos leyendo.
La accesibilidad en la web se refiere a la capacidad de acceso a la Web y a sus contenidos por todas las personas independientemente de la discapacidad (física, intelectual o técnica) que presenten o de las que se deriven del contexto de uso (tecnológico o ambiental). Esta cualidad está íntimamente relacionada con la usabilidad.
Cuando los sitios web están diseñados pensando en la accesibilidad, todos los usuarios pueden acceder en condiciones de igualdad a los contenidos. Por ejemplo, cuando un sitio tiene un código XHTML semánticamente correcto, se proporciona un texto equivalente alternativo a las imágenes y a los enlaces se les da un nombre significativo, esto permite a los usuarios ciegos utilizar lectores de pantalla o líneas Braille para acceder a los contenidos. Cuando los vídeos disponen de subtítulos, los usuarios con dificultades auditivas podrán entenderlos plenamente. Si los contenidos están escritos en un lenguaje sencillo e ilustrados con diagramas y animaciones, los usuarios con dislexia o problemas de aprendizaje están en mejores condiciones de entenderlos.
Si el tamaño del texto es lo suficientemente grande, los usuarios con problemas visuales puedan leerlo sin dificultad. De igual modo, el tamaño de los botones o las áreas activas adecuado puede facilitar su uso a los usuarios que no pueden controlar el ratón con precisión. Si se evitan las acciones que dependan de un dispositivo concreto (pulsar una tecla, hacer clic con el ratón) el usuario podrá escoger el dispositivo que más le convenga.[1]
En España existen diversas leyes para salvaguardar los derechos de las personas que poseen algún tipo de discapacidad, por lo tanto también tienen derecho a acceder a la Web. Dichas leyes son entre otras:
§ Ley 34/2002 de 11 de julio, de servicios de la sociedad de la información y de comercio electrónico.
§ Ley 51/2003 de 2 de diciembre de Igualdad de Oportunidades, No Discriminación y Accesibilidad Universal con discapacidad (LIONDAU).
§ Real Decreto 366/2007 de 16 de marzo, de accesibilidad y no discriminación de las personas con discapacidad en sus relaciones con la Administración General del Estado.
§ Ley 27/2007, de 23 de octubre, por la que se reconocen las lenguas de signos españolas y se regulan los medios de apoyo a la comunicación oral de las personas sordas, con discapacidad auditiva y sordociegas.
§ Real Decreto 1494/2007, de 12 de noviembre, por el que se aprueba el Reglamento sobre las condiciones básicas para el acceso de las personas con discapacidad a la sociedad de la información.
§ Ley 49/2007, de 26 de diciembre, por la que se establece el régimen de infracciones y sanciones en materia de igualdad de oportunidades, no discriminación y accesibilidad universal de las personas con discapacidad.
En ellas podemos encontrar la información relevante sobre la accesibilidad de las personas con discapacidad tanto en la red como en la vida diaria. La accesibilidad ha sido un preseco largo en nuestro país desde que se empezó a tener en cuenta a las personas que poseían algún tipo de discapacidad, ya que antiguamente directamente se las ignoraba. Es obligación de todos seguir agilizando el camino hacia la eliminación de barreras total y absoluta.
Las nuevas tecnologías son un arma de doble filo para este colectivo ya que por un lado pueden suponer ayudas técnicas que faciliten su día a día, pero por otro lado sin la correcta accesibilidad pueden suponer un mundo inalcanzable para ellos.
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